Vecinos habían alertado previamente sobre la situación del niño, quien, según testimonios, vivía en condiciones precarias y sufría agresiones.
Un nuevo caso de presunto maltrato infantil ha generado indignación a nivel nacional. En la ciudad de Iquique, una mujer fue puesta en prisión preventiva luego de que denuncias vecinales alertaran sobre la situación de su hijastro de 13 años, quien presuntamente vivía en condiciones de vulnerabilidad extrema.
Según la fiscal Paula Arancibia, jefa de la Unidad Regional de Atención a Víctimas y Testigos (Uravit), la madrastra, de nacionalidad chilena, fue formalizada por los presuntos delitos de homicidio frustrado y maltrato habitual. La investigación preliminar ha acreditado que el menor dormía en el patio y era forzado “a realizar acciones como lavar el auto o recoger excrementos de animales con la mano “.
La fiscal Arancibia añadió que “No le dejaban entrar a la casa salvo para hacer aseo, le privaban de agua y comida y sus necesidades las hacía en bolsas o botellas “.
Además, se dieron a conocer las declaraciones “de otra testigo y de su hija, de 13 años, que estuvieron viviendo en la casa de la imputada por un mes y presenciaron las denostaciones verbales y agresiones físicas hechas al niño “, según la persecutora.
Se constató también que el menor no asistía a la escuela desde agosto del año anterior, presentaba un “más que preocupante estado nutricional” y en una ocasión fue aparentemente abandonado lejos de su hogar, debiendo regresar tras una caminata de tres horas durante la madrugada.
El testimonio del niño
La custodia del niño estaba a cargo de la madrastra después de que el padre abandonara el hogar tras ser denunciado por ella misma por presuntas agresiones.
La fiscal Arancibia complementó que “Quien detentaba el cuidado personal decretado por el Tribunal de Familia ejecutó acciones que significaron en el niño graves lesiones, en distintas partes de su cuerpo propinadas con distintos objetos».
La indignación pública se intensificó al conocerse la declaración del menor, leída por la fiscal de Iquique, Camila Abarracín, en la que acusó que la mujer lo obligaba a dormir en el patio, en ocasiones sin ropa.
«No me dejaba entrar al baño, no me podía bañar, a veces pasaba meses sin bañarme. En una oportunidad estuve 6 días sin comer y 3 días sin tomar agua “, aseguró el niño en su testimonio.
El presunto maltrato físico habría escalado con el tiempo.” Al principio eran con chancletas, pero después fue hasta con palos “, agregó el menor.
Sobre el presunto maltrato psicológico, detalló: «Me decía que soy tonto, que soy un inútil, que me odiaba, que nadie me quería, que no tenía mamá “.
Ante estos antecedentes, el Juzgado de Garantía de Iquique decretó prisión preventiva para la madrastra y estableció un plazo de 90 días para la investigación del caso.
Declaraciones de vecinos
Vecinos del sector manifestaron a un medio local que habían realizado denuncias sobre los presuntos maltratos que sufría el menor hace “más de un año”. Sin embargo, según sus relatos, la policía acudía al lugar, tomaba declaraciones y no se registraban mayores acciones.
Una vecina relató: “esto viene del año pasado más o menos, cuando Carabineros iba con frecuencia a esta casa y tomaba información del caso. Hay una vecina que también sabe de esto, ya que tenía videos de lo que se escuchaba al lado y cómo lloraba este niñito».
Agregó: “Carabineros venía y tomaba antecedentes, pero se volvían a ir (…) Nos dijeron que nosotros podríamos ser testigos y accedimos, pero pedíamos que sacaran al chico. Y ahí nos respondieron que ‘la idea no es sacarlo, porque sería llevado al Sename y eso es lo que no queremos”.
Finalmente, la vecina señaló: “Hasta ahí llegó el tema; no se movió nada más hasta que apareció la Policía de Investigaciones”.
Durante la jornada actual, el Tribunal de Familia de Iquique deberá determinar la tutela del menor, considerando que el padre reside en la ciudad de Constitución, en el sur del país.