El senador José Miguel Durana (UDI) ingresó al Senado una Reforma Constitucional que busca otorgar a la Región de Arica y Parinacota el estatus jurídico de «Territorio Especial», equiparándola con la Isla de Pascua y el Archipiélago de Juan Fernández. La iniciativa busca responder a las condiciones geopolíticas, históricas y sociales únicas de la región, además de los desafíos que enfrenta por su ubicación estratégica en la frontera norte del país.
Durana argumentó que esta calificación permitiría implementar políticas, leyes y medidas administrativas específicas que reconozcan su importancia en la defensa de la soberanía nacional y su papel como barrera fitosanitaria del país. Asimismo, destacó los efectos que los Tratados de 1904 y 1929 con Bolivia y Perú han tenido sobre el desarrollo económico y territorial de la zona.
“La región ha vivido constantemente tensionada por conflictos territoriales y geopolíticos, y ha sufrido impactos significativos, como la pérdida de zona marítima tras el fallo de La Haya. Además, enfrentamos restricciones por la presencia de propiedades extranjeras en la ciudad y por decisiones que se toman en Santiago sin considerar la realidad local”, subrayó el parlamentario.
Migración Irregular Y Demanda De Servicios
Durana también abordó la presión que enfrenta la región por el ingreso masivo de migrantes. Sólo en 2019, en época prepandemia, Arica recibió más de un millón ochocientos mil extranjeros. A esto se suma el flujo constante de migrantes irregulares, lo que genera una alta demanda de servicios básicos, seguridad y planificación urbana, distinta al resto del país.
Impacto De Los Tratados Internacionales
Respecto del Tratado de 1904, el senador denunció que Arica está limitada urbanísticamente por la línea férrea a La Paz, que Bolivia mantiene fuera de operación. Además, criticó que sólo camiones bolivianos puedan transportar mercaderías por la ruta, debido a las restricciones impuestas por el acuerdo. Asimismo, el Puerto de Arica está impedido de realizar cabotaje, lo que frena su desarrollo como nodo logístico nacional e internacional.
Con esta reforma, el senador busca que el Estado reconozca formalmente las particularidades de la región y actúe en consecuencia, promoviendo un desarrollo equitativo y justo frente a las limitaciones históricas que ha enfrentado.